Llegamos al escenario House of Vans a ver a los neoyorquinos Beach Fossils, que partieron puntualmente pero terminaron cerca de 15 minutos antes de lo programado, y aunque tocaron lo mejor de su repertorio y adelantaron canciones de su nuevo disco “Somersault”, quedé con ganas de escuchar más.
Unos minutos más tarde los post rockeros This Will Detroy You se hicieron del escenario, en una pausa/estridencia muy respetada por los fans. El público fiel no dejaba de sorprenderse con el grupo, una presentación impecable que en sus mejores momentos puede recordar a bandas como Mogwai.
Siempre en el mismo escenario y por segunda vez en nuestro país se presentó una de las bandas favoritas de la jornada: los suecos The Radio Dept. Tocaron canciones de su más reciente disco llamado “Runnig out of love” (2016) y varios temas de sus producciones anteriores como fue “Pet grief” y “Domestic scene”. Un show completo de la mejor calidad, esta vez con más acento electrónico y sintético, que se extendió por cerca de una hora y que fue una increíble experiencia, especialmente para los más fieles.
El día más shoegaze del año tenía aún más sorpresas. El plato fuerte de la noche sin dudas fue Slowdive. La legendaria banda británica por fin se presentó en nuestro país, y la verdad pocos pensaron que esto sería posible. Debemos agradecer a la productora Fauna por cumplir un sueño que para muchos era inalcanzable. Los británicos tocaron su repertorio clásico, incluyendo himnos como “Crazy for you” o “40 days”, además de repasar temas de su nuevo disco homónimo, lanzado este año. Con bis incluido los creadores de “Souvlaki” (1993) fueron pura emoción.
Más tarde el escenario House of Vans se convertiría en una pista de baile. Empezamos a movernos un poco y vimos al destacado chileno Matías Aguayo, siempre eficaz en materia de electrónica y baile, mientras que el noruego Lindstrom haría lo propio un poco más tarde en el stage El Club: su set fue implacable y perfecto para comenzar a cerrar la noche.